Informe octubre 2020

 Neomenia (Luna Nueva) del 16 de octubre de 2020, en 23º 53´ de Libra

 

Sentido del informe

El momento exacto en el que la Luna y el Sol, vistos desde la Tierra, se unen en un determinado grado del zodiaco tropical se denomina neomenia o luna nueva.

El Sol, estrella de su sistema, en el que habitamos, es nuestra fuente de luz y calor, así como de otras muchas radiaciones que no solemos tener en cuenta. Con sus seis mil millones de años de existencia, está en movimiento continuo por la galaxia que llamamos Via Lactea, (la carretera lechera), arrastrándonos con él. Es pues, en muchos sentidos, el centro y origen de nuestra vida en la Tierra.

Por otra parte, la Luna, satélite gigante de la Tierra y la otra gran luminaria en nuestro cielo, tiene una danza aparente de acercamiento y alejamiento del Sol, reuniéndose cada 29,5 días (rotaciones de la Tierra en torno a su propio eje) de modo reiterado desde hace milenios.
De esta relación de la Tierra, el Sol y la Luna, todas las culturas humanas han alimentado su imaginación, maravillado su entendimiento y creado calendarios para fijar el regulado paso del tiempo.

Este contexto real en el que se desarrolla nuestra existencia ha sido estudiado y desarrollado con bastante detalle por la disciplina que llamamos astrología y que tiene muchísimas aplicaciones. De hecho, todos sabemos más astrología de lo que podríamos suponer. Ello es debido a que los conocimientos astrológicos son tan antiguos que están incorporados de modo natural e inconsciente en nuestras vidas.

Una de las muchas aplicaciones ha sido el calendario agrícola, es decir, buscar los momentos más apropiados para las diversas tareas de la vida campestre. Y una esencial es elegir bien el momento de sembrar las semillas.

Ampliando el concepto, la idea es elegir el momento propicio para iniciar una actividad. Por eso la rama de la astrología que se ocupa de esto se llama astrología electiva.

Aplicando el pensamiento analógico y el sentido común, contrastado con la experiencia, se sabe que en los días siguientes a que se produzca la luna nueva, más exactamente los días que a la puesta de sol, ya se divisa un hilillo de luz de la nueva lunación, son propicios para sembrar propósitos que estén en armonía con la tonalidad de esa lunación. Hay varias fuentes del tipo de propósitos que serían estos. Por eso este informe tiene dos partes. En la primera expongo y escribo acerca de las posiciones reales del cielo para el momento exacto de la luna nueva. Esas son únicas e irrepetibles en la vida humana. Y las considero dentro del contexto de los ciclos que estamos viviendo actualmente.

En la segunda parte, lo que se tiene en cuenta es la naturaleza del grado zodiacal donde se produce el encuentro del Sol y la Luna. Para ello aplico los valores tradicionales compilados y ofrecidos por Arturo González Mata, que son los de los genios de la esfera de Marte que rigen combinadamente ese lugar zodiacal determinado.

Con la experiencia se comprueba que esa tonalidad se manifiesta a lo largo de la lunación, se haga o no un ritual de sincronización. Pero tenemos la posibilidad de adaptar y elegir la naturaleza de ese grado para realizar algún tipo de acto intencional de sincronización. Obviamente, aquí entramos en un terreno muy particular que es el de las creencias. Si se tiene experiencia en magia o en alguna otra disciplina tradicional, como teúrgia o análogas, se puede aplicar. Si no se tiene o contradice el propio sistema de creencias, se puede simplemente hacer algún tipo de intencionalidad que fije la voluntad de emprender una acción afín con las propuestas. También se puede mantener una actitud de sano escepticismo y observar durante algunas lunaciones si existe esa coincidencia entre los temas propuestos y lo realmente acontecido, para a partir de ahí forjar una actitud más definida. Eso queda a la libre voluntad del lector o lectora. A modo de recordatorio, cito lo que ya escribí en un informe de hace meses:

La Magia puede ser entendida como la tecnología de explorar quienes somos realmente. Más allá o antes de cualquier condicionante social o cultural.

Teniendo esto en cuenta, podemos prestar atención en dos niveles o esferas:

·           Lo que sin intervención de nuestra voluntad llegue o suceda en nuestra experiencia.

·           Lo que deliberadamente elegimos de modo consciente para iniciar, renovar o finalizar.

El procedimiento por el cual sintonizamos conscientemente con lo que la experiencia personal nos depare en las próximas cuatro semanas, es la ritualidad. Así nos proponemos alinear nuestro consciente e inconsciente de modo análogo a cuando elegimos una semilla, la plantamos y cuidamos.

Obviamente hacemos esto con mucha frecuencia, la diferencia estriba en que el propósito es unificador.

Meditamos acerca de nuestros intereses, de lo que tenemos y carecemos, del punto de nuestro camino en el que nos encontramos y del recorrido y experiencias que esperamos en adelante.

A partir de ahí seleccionamos determinadas semillas, en forma de propósitos y las ponemos por escrito, pensamos en lo que esperamos que suceda y nos comprometemos a hacer lo necesario que dependa de nosotros, entregando al cosmos, (la voluntad del cielo u otra formulación similar acorde con nuestro sistema de creencias) el resto.

 

Informe de la situación global desde el punto de vista cósmico y simbólico

El gráfico de arriba es el mapa celeste del momento de la lunación, levantado para la capital de España. En él, continuamos dentro de los grandes ciclos marcados por la presencia de Júpiter, Saturno y Plutón en Capricornio que hacen referencia a la transición del modelo social en el que nos encontramos. Las viejas estructuras sometidas a crisis y la nueva delimitación de lo que tiene que ser la sociedad de las próximas dos décadas.

Este es el primer encuentro entre las luminarias (Sol y Luna) que se produce desde el comienzo del otoño boreal. Entramos en la fase final del acercamiento entre los dos planetas gigantes del sistema solar que se producirá exactamente el 21 de diciembre, dando comienzo al nuevo ciclo de los cronocrátores (Júpiter/Saturno) en el grado cero de Acuario, que marca el inicio también de una nueva fase en la cultura humana sobre el planeta Tierra.

A estas alturas a nadie le cabe duda de que esto no es algo teórico fruto de creencias ancestrales. Estamos asistiendo a la descomposición y remate no sólo del actual ciclo iniciado en su última conjunción que se produjo el 28 de mayo de 2000, sino también del ciclo de conjunciones en signos de tierra que inició en 1802.

1802 es el año de la Constitución del año X en Francia que consagra a Napoleón como Cónsul Vitalicio. Lo que le situó como máximo dirigente militar del país y paso previo a su ascenso a Emperador dos años después.

También es el año de la boda en Madrid de Simón Bolívar, a partir de la cual se gesta su giro vital tras la muerte de su esposa pocos meses después y su viaje a Paris.
En literatura es un año de referencia por el nacimiento de Alejandro Dumas y Víctor Hugo.

En matemáticas es el tiempo en el que se está gestando grandes transformaciones que se popularizarán más adelante transformado la velocidad del desarrollo científico.

En la transición del punto de conjunción de los cronocrátores de una triplicidad a otra, es normal cierto entrelazado que supone en el primer periodo de 20 años la manifestación del nuevo estilo que llega, luego superpuesto con otro periodo de 20 años de estertores del periodo que termina.
Los historiadores, al carecer de un reloj histórico de referencia, como podrían ser las efemérides planetarias, no se ponen de acuerdo en la datación de la periodización de la historia. Toman como referencia diversos acontecimientos notables para hacerlo y dadas las variaciones de cada país y la diversidad de hechos, se tiende a elegir los más luctuosos o dramáticos.
Desde el punto de vista de la astrología, sabemos que el inicio de algo y su manifestación o florecimiento no tienen por qué ser especialmente notables en lo externo, pero pueden ser fulcros indispensables para acontecimientos posteriores.

Estamos en tiempos del final de la Edad Moderna y el comienzo de la Edad Contemporánea. También en los albores del Romanticismo y, sobre todo, en la primera Revolución Industrial.

Todos estos acontecimientos pueden encontrar sincronía en diversos hitos cósmicos, de los que aquí solo estamos considerando la conjunción de los cronocrátores en primer y segundo orden de sus periodos.

Se puede conjeturar que el ciclo de tierra está claramente vinculado al aumento de la producción en todos los órdenes y que ha sido la base para la mayor explosión demográfica que se haya conocido. Ha traído aparejada también la más grande explotación de los recursos naturales del planeta del que formamos parte.

El gráfico que aporto, es parte de una tabla que he elaborado con las conjunciones exactas de Júpiter y Saturno durante 28 siglos, a partir de la Fundación Roma, como apoyo y referencia para posteriores estudios.

Viniendo al actual entrelazamiento entre los periodos de tierra y aire, podemos suponer que estamos ante un cambio de acento de la evolución cultural que, de acuerdo al simbolismo del elemento aire, da prioridad a la información, la cooperación y el equilibrio entre la humanidad y el planeta, más que a la explotación inicua y desconsiderada vivida en los últimos dos siglos. Y es obvio que el traumatismo colectivo de este 2020 es un punto de inflexión que nos recuerda no tanto que la Naturaleza sea nuestra enemiga, como que la humanidad es lo suficientemente vulnerable para no puede ser ajena a las consecuencias de sus acciones sobre un sistema del que forma parte.

Quizá el predominio del elemento aire siga siendo el sueño de escaparse de este planeta durante un tiempo, hasta que la evidencia de que tal cosa es una fantasía irrealizable para la biología de unos simios orgullosos, de paso a una actitud de mayor humildad, realismo y sentido común. A partir de ahí un ciclo en el desarrollo de la humanidad es posible.

Hablábamos de la humildad en la siembra del pasado mes lunar. Seguimos teniendo oportunidades para descubrir el gran mundo que se abre cuando uno se agacha para pasar la estrecha puerta reservada a los seres humildes.

Como decía el escrito anterior:

Humillarse no es denigrarse a uno mismo, es reconocer al otro como un igual, aunque su función social o temporal sea de diferente rango. Se reconoce a la persona que tenemos en frente. Lamentablemente eso ha degenerado en determinados contextos a una falsa interpretación. Esta es una buena época para restaurar la situación. El otro, sea cual sea su función, es un igual. Y nosotros mismos, sea cual sea nuestra función, somos iguales a los demás. El respeto es igualitario y recíproco. Es un derecho y una obligación.

Este mes la lunación se produce en el signo de Libra, puerta equinoccial del equilibrio y el cambio de declinación solar hacia el Sur. Comienzo del otoño boreal. Comienzo del año judío. Signo de la aceptación de la existencial del otro. El individuo no existe solo sino en contexto de los demás individuos. De ahí nace la búsqueda del equilibrio en las relaciones. La conciencia del otro que es tan individuo como yo, probablemente con las mismas inquietudes, inseguridades y temores; con las mismas necesidades y, por qué no, con los mismos derechos. Por tanto, nace la necesidad de establecer las normas de coexistencia, convivencia u oposición. Nace la necesidad de la norma, la regulación, la posibilidad de establecer el compromiso o el contrato por el cual el otro respecto a mí, y yo respecto al otro, podamos elegir si cooperamos, competimos o nos respetamos. Lo que ya no podemos es ignorarnos, pues reconocernos es parte de nuestro desarrollo.

 

Símbolo sabiano

El símbolo sabiano correspondiente al grado 23 de Virgo es:

Una mariposa con una tercera ala en su lado izquierdo

En otros términos, la sabiduría dispone de recursos inesperados.

Una de sus interpretaciones es que no nos sintamos limitados por las apariencias de la actual situación, pues la Naturaleza está en un proceso continuo de mutación explorando todas las posibilidades.  

Si vivimos en el mejor de los mundos posibles es porque está en perpetuo cambio y evolución, para hacer el mejor de los mundos posibles.

 

Informe con orientaciones para la siembra mensual

La siembra puede realizarse a partir de la tarde del domingo 18, y también durante el lunes 19 e incluso el martes 20.

El lugar de la lunación, en el grado 23 del signo de Libra, tiene atribuida su regencia, desde el punto de vista de los genios de la esfera activa simbólica, a Arpien, asociado a Júpiter en el signo de Libra.

Júpiter en Libra está asociado a una comprensión y explicación moderada de la coexistencia. Un impulso decidido hacia la socialización, la cooperación y el emprendimiento. Establecimiento de relaciones diplomáticas con los adversarios, pactos de ayuda mutua con los iguales o protección de los más necesitados.

Del mismo modo, se asocia a los procesos necesarios para la realización de estos fines: Regulaciones, vínculos, compromisos y sus cláusulas, dotes, garantías, asociaciones, matrimonios, concordatos y alianzas. Diplomacia, embajada, representación, cortesía, prestigio, apariencia, modales y contraprestaciones.

El genio correspondiente al par de grados donde sucede la lunación es Homot, el regente del tercer decanato del signo de Capricornio, asociado al Sol en Capricornio.

Su simbolismo está relacionado con la habilidad de reducir las necesidades al mínimo para la realización de los objetivos, la perseverancia de lo esencial en cualquier adversidad y la estructura subyacente esencial. Sea en lo material o en lo biológico. Todo lo prescindible en relación con todo lo imprescindible. Establecimiento de la jerarquía de valores en función de su lugar en el proceso de la existencia. Prescindibilidad de lo superfluo, combinación de utilidad y belleza, la belleza que sobrevive al desprendimiento de lo inútil. Parquedad, concisión, delimitación de lo valioso. En el espacio, lo comprimido, pero transparente: el diamante. En el tiempo, la mínima actividad y consumo de energía, la optimización de los recursos para lograr los objetivos. El descanso para recuperar la energía necesaria para llegar a la cumbre.

La interpretación de los símbolos en nuestra mente es como sacar cerezas de una cesta… unos significados nos llevan a otros, igual que las neuronas mantienen diversas conexiones.

Estoy seguro de que mientras se lee, vienen a la mente varios ejemplos. Al igual que algunos árboles se desprenden de sus hojas, y la luz puede llegar hasta el suelo del bosque, así aliviarnos de elementos innecesarios nos permite aprovechar al máximo los recursos de cada época.

Por último, mantengamos una confianza total en que las adversidades son el contexto en el que se desarrollan las capacidades. Ser expulsados de la zona de comodidad colectiva puede permitirnos reconocer lo mejor de los demás y en nosotros mismos. Para el amor siempre hay tiempo.

 

De momento nada más.

Feliz mes y feliz siembra

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Agradezco todos los comentarios acerca de la experiencia con el informe mensual,

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Fragmento del libro Ángeles y Genios en la Astrología Caldea, de Arturo González Mata  

 

Genio correspondiente al decanato:
Nombre caldeo, Arpien. Tercer Decano de Libra. Planeta: Marduk o Júpiter. Nombre Grecolatino: Némesis.

Cara Exterior:

1.       Justicia benevolente, derecho.

2.       Diplomacia, embajadas, Negociaciones de todo tipo, pero especialmente legales e internacionales.

3.       Capacidad de negociación y acuerdo, tratos mutuamente beneficiosos, confianza mutua.

4.       Sociedades científicas, filosóficas, teóricas, religiosas, del derecho, filantrópicas, ocultistas...

5.       Política, especialmente en el poder legislativo. Suerte en la carrera política.

6.       Para o contra el abuso de confianza, la difamación.

7.       Contra la traición de los aliados, abogados, socios...

8.       Para descubrir a los enemigos ocultos.

9.       Para convertir a los enemigos en aliados.

10.    Para o contra los enfrentamientos y enemistades con religiosos, teóricos, diputados, actores, juristas.

11.    Éxito en los juicios.

12.    Expansión y beneficios por todo lo relacionado con el arte y los artistas.

13.    Enemistad o alianzas beneficiosas con extranjeros.

14.    Para la expansión y el éxito de cualquier sociedad.

15.    Éxito en tareas de protocolo.

 

Cara Interior:

1.       Religiosidad y ritual social.

2.       Liderazgo religioso y organización social de la religión.

3.       Apostasía o sacerdocio.

4.       Lucha contra la religión socialmente dominante.

5.       Habilidad negociadora.

6.       Adaptabilidad, oportunismo.

7.       Enemigos que abusan de la confianza.

8.       Matrimonio beneficioso. Matrimonio con extranjeros, religiosos, juristas, ocultistas, personal de centros de

aislamiento, personal diplomático, etc.

9.       Pareja con impedimentos físicos y su solución.

 

Genio correspondiente al par:
Nombre caldeo, Homot. Tercer Decano de Capricornio. Planeta: Samasch o Sol. Nombre Grecolatino: Tolma.

Cara Exterior:

1.       Para obtener o quitar ambición profesional, política o social. Para cualquier carrera profesional que se base en un escalafón o en la antigüedad.

2.       Para controlar a quienes tienen una posición jerárquica oficial o librarnos de su poder e influencia.

3.       Para el éxito o fracaso en puestos políticos brillantes.

4.       Para obtener puestos ejecutivos especialmente en el Estado y sus entidades subalternas, o en entidades dedicadas a bolsa y especulación económica. Para la gestión pública.

5.       Ascenso, brillo social o profesional, respeto social. Orgullo por la posición mundana.

6.       Para o contra la insubordinación. Para ganar o perder el respeto de los subordinados.

7.       Para o contra la esterilidad profesional. Desarrollo del talento profesional y su reconocimiento.

8.       Éxito en minería, arquitectura, historia.

9.       Éxito y fertilidad en cualquier profesión creativa.

 

Cara Interior:

1.       Para dar o quitar sentido del deber y responsabilidad.

2.       Para obtener sentido de la responsabilidad social o librarnos de esta.

3.       Para desarrollar nuestra personalidad endureciéndonos, aceptando la soledad, la responsabilidad, la experiencia. Para madurar. Para poder abandonar la protección familiar o institucional, o para obtener esta.

4.       Para o contra la soledad y la soltería.

5.       Para o contra la esterilidad física o mental.

6.       Para poder desarrollar cualquier tarea que requiera paciencia, experiencia y claridad de ideas.

7.       Para obtener el respeto de la familia.

8.       Para que los hijos asciendan profesional o socialmente y para que maduren.

9.       Para gestionar bien, o no, los propios recursos y el patrimonio familiar.

10.    Liberarnos de cualquier imposición jerárquica y de los abusos de autoridad o poder.

11.    Para mejorar física y mentalmente con los años, vida larga y organismo resistente.

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Créditos:

Los cálculos están realizados a partir de los datos de las efemérides The Rosacrucian Ephemeris 2000-2050, editorial S. Michel. El programa para la elaboración del mapa celeste ha sido Solar Fire, de Astrolabe Inc. Los textos de los genios están extraídos del libro Ángeles y Genios en la Astrología Caldea, de Arturo González Mata Santana.
Gracias a Esmeralda V por sus correcciones.

El texto, la edición y notas a cargo de José Solís. Más información y contacto: Blog    Facebook